
Miro, respiro y camino
Doy aliendo, insuflo vida
inyecto esperanza e inhalo sueños.
Al tumbarme en la cama miro el techo, donde el ventilador de aspas permanece inmóvil. La ventana está abierta y el sol entra por ella lamiendo la cama. Un pájaro canturrea alegremente y los ruidos de la vida me llegan hasta mí; Un crío llorando, alguien en al cocina moviendo platos, una televisión a volumen alto...
Aparto mi mirada del techo y miro al cielo por mi ventana. Es azul, muy azul. Casi parece pintado. Noto el dolor de mis pupilas al contraerse bruscamente.
Casi respiro el calor. La primavera que me aplasta el pecho y me hace divagar.
Mi mente como siempre no para, va de un lado a otro, incapaz de mantenerse en algo durante mas de un minuto. Siento pena, rabia, nostalgia, añoranza, soledad, desamor, amor... todo perfectamente revuelto en mi cabeza y en un orden establecido.
La música suena de fondo pero no le presto atención. Es algo que está ahi... como mi vida. No soy consciente de ella pero la vivo. Día a día, hora a hora.
El sol caliente mi cabeza y cierro los ojos. Y ahora sí que la oigo. Un violín in crescendo, un piano que masajea mis sentidos...
Vuelvo a abrir los ojos y el sol me vuelve a deslumbrar.
Es tan azul...
Estoy bien. Vivo y siento.
Levanto mi mano donde pequeñas grietas la surcan. Y la miro por un lado y otro. Lineas de la vida que se entrecuzan por un lado, lineas del tiempo que aparecen por el otro.
El tiempo pasa... sin duda, pero el cielo permanece azul.
Noto que mi pecho se levanta y cae al respirar... y me quedo mirandolo en su vaivén.
Durante un momento... una fracción de segundo me dan ganas de llorar.
Pero el pajarillo vuelve con su canturreo y lo olvido.
Entonces... el móvil suena.
Me pongo en tensión y es como si de golpe mis cinco sentidos regresaran. Como si todo mi cuerpo se pusiera en guardia y listo para la acción.
Mi vida... hace una pausa..
- Hola.- digo.- ¿Cómo estás?.