Rozé tus labios con los mios, sientiéndolos en mi propia piel.
Abriendo mi boca y jugueteando con tu lengua, sintiendo tu aliento caliente, la humedad de tu boca.
Me separé de tí, y te miré a la cara. Ténías los ojos muy abiertos y tus pupilas dilatadas. Respirabas rápidamente, y una suave sonrisa se dibujaba en tus labios.
Me quedé mirándote lo que me parecío una eternidad, viendo tu cabello revuelto que caía por tus hombros.
Me acerqué a tus mejillas y te besé. Olías a tu perfume favorito.
Mis labios sentían la suavidad de tu piel, y apartando levemente la cara rozé tu mejilla con la mia cerrando los ojos.
La música nos envolvía suavemente.
Sentía tu pelo cosquillearme la punta de mi nariz y lo podía oler. Sentía el rubor de tu mejilla contra la mía. Tus brazos me envolvieron y me arroparon de amor.
Volví a separme de tí y te miré de nuevo.
No podías ser más hermosa. El pelo negro como una noche sin estrellas cubría la almohada y me apetecía con locura sumergirme en esa marea negra. Tus bellos ojos me miraban fijamente sin perder detalle de mí. Tu respiracion era cada vez mas agitada.
Sin poderlo evitar me perdí en la curva de tu cuello cerrando los ojos y abriendo levemente mis labios, atrapando las pulsaciones de tu corazón y haciéndolas mías. Sientiendo tu calor y tus suspiros junto a mi oreja. Notando como tu cuerpo se estremecía y se movía bajo el mío... Tus manos en mi espalda que me atraen hacia ti, que me envuelven y que me aprietan fuertemente.
Te beso el cuello y la punta de mi lengua se quema en tu piel caliente.
- Te amo mi vida.... Que es mucho más que te quiero. -Susurro a sus oídos.
- No me faltes nunca, nunca. Te necesito para vivir. - Me responde ella.
Caigo a su lado, y me acurruco mirándola de frente. El pelo le ha caido hacia un lado al girarse también y me duele el corazón al verla.
Le paso un dedo por su nariz, por sus cejas, bordeando sus ojos, cayendo por su mejilla y bajando por su cuello...Siento su calor, y la suavidad de su piel. Bajo por su esternón desviándome hacia un lado entre su camisa abierta, y me pierdo en la suavidad de su pecho.
Ella me sonríe pícaramente.
Acerca sus labios y me besa. Quedando nuestros labios levemente enganchados al separarse.
- ¿Ves?, ni ellos quieren dejar de estar juntos.- Me dices.
- No quiero vivir. Quiero quedarme aquí siempre .- Le respondo.
Ella sonríe mostrándome su bonita sonrisa.
- ¿Porqué no quieres vivir, tonto? Estarías conmigo siempre.
Me abrazo a ella y pongo mi cabeza sobre su pecho sintiendo su corazón.
- Porque en la vida real, fuera de aquí, todo acabara... y no quiero.
Ella me abraza con mucha fuerza cogiendo luego mi cabeza entre sus manos y apretándola aún mas contra su pecho.
- Pues quedémonos eternamente así. Para que el tiempo no nos pueda.
"A todos los que aman o amaron. Feliz navidad."