Y la muerte me lleva entre sus terribles garras
arrancándome a jirones la piel que cubre mi corazón
y allí el demonio perverso lo come a grandes mordiscos con sus
dientes ensangrentados, preguntándome riendo que para qué coño
creía que servía aquello, sino para alimentar a las malas bestias y
servir de estorbo.
2 comentarios:
Aunque sirva de estorbo, no podriamos vivir sin él , aunque hay muchos zombies que se creen vivos.
Es buena y la verdad es que se ve que ha salido directamente de tus entrañas, que liberación.
Tal vez estas palabras formen una oscura pesadilla que te atormenta... pero bien cierto es que enfrentarse a las pesadillas hace más fuerte el espíritu... hace que cada uno de nosotros renazcamos con renovadas fuerzas...
Besos y fuerza!!!
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