sábado, 17 de noviembre de 2007

Lobo perdido




En la oscuridad de la noche, siento el aullido de un lobo.
Aúlla de rabia y de dolor, su grito resuena en la niebla desgarrando el silencio.

Siento miedo porque no es el lobo que conocía, un lobo amable, un lobo que lamía mis manos en busca de restos de comida. Un lobo con el que salía a pasear por los senderos del bosque, un lobo con el que compartía momentos de mi vida.

Un nuevo aullido paraliza mi corazón.
Lleva así un tiempo.
Gritando y quejándose lastimeramente. Ya no ronda mi casa como lo hacía antes. No acecha mi puerta para entrar inadvertidamente cuando no me daba cuenta, a tumbarse al lado de la chimenea.

Es como si andase perdido. Como si hubiese olvidado el camino de mi hogar.
Ayer encontré un arbol con la corteza destrozada por tus garras.
Como si necesitases descargar tu furia con algo.
La tierra del suelo estaba revuelta, como si hubieses arañado el suelo, y luego te hubieses revolcado en la sucia tierra.
¿Necesitabas envolverte en tu propia ira?, ¿expiar tus culpas?, ¿envolverte en tu propio dolor?.

¿Qué te ha pasado amigo lobo?.
¿Quién te ha hecho tanto daño?
¿Quién te ha convertido en esto que eres?...

De pronto advierto que rondas mi casa.
He notado tu respiración...
He notado tus pisadas hundiéndose en la nieve.

¿Qué quieres?
¿Qué vuelves a buscar aqui?...

Siento como tus pisadas se acercan a la puerta... te detienes.
Husmeas por la rendija como tantas veces has hecho.... y resoplas
Tu respiración se tranquiliza... lo noto.
Lanzas una especie de gruñido que mas bien es un suspiro.
Es como si mi miedo se fuese tranquilizando. Aplacando.
Veo tu sombra a través de la rendija que se mueve al lado de la puerta.

silencio....

entonces una de tus patas araña la puerta.
No se que hacer... ¿y si me atacas?, ¿y si tu ira vuelve?, ¿y si no eres el mismo lobo?.

A pesar de todo, mis pasos me dirigen a la puerta.
Mi mano coge el pomo... y se abre.

Allí estás, mirándome con tus grandes ojos. Y no hay odio en ellos. No hay dolor, no hay rabia.
Sólo la limpia mirada de mi lobo.

Me miras un instante a los ojos, y entras en la cabaña, con aptitud humilde, acércandote a la chimenea.
Llegas hasta allí y te echas en el suelo, girando tu cabeza y mirándome.

Me acerco a ti y te acaricio el lomo.
Tus ojos transmiten paz. La paz tan buscada estos dias.
Me agacho y te abrazo.

Bienvenido a casa lobo.

Bienvenido a casa viejo amigo

Fuera hace frio, y la noche despliega su manto oscuro.

Te eche tanto de menos....











2 comentarios:

emperatriz dijo...

Hola mi pequeño.
Ya ves, al final no he logrado dormir, aquí me ves a las siete menos cuarto, con los Hojos (jajajaja) escocidos, y el cuerpo hecho añicos.
Pero incapaz de meterme en la cama, el sueño no me reclama esta noche.Como siempre que estoy sola.
Es curioso, Sueño, celebras el regreso de tu Lobo en esta entrada.
Y hoy me has dicho, lo contento que estabas por mi vuelta.
Quizás era eso lo que necesitaba, bueno, quizás no, tú lo sabes de sobra.
Al menos es un algo al que aferrarse.No?
El dolor, me tiene, un poco maniatados los sentimientos, el miedo es mi rey ahora, ..pero él sigue siendo mi principe.Sólo tiene que derrocarle, a mi miedo y al suyo , para rescatar a esta emperatriz del pozo oscuro en que se encuentra.
Conquistar un corazón, nunca se antojó tan complicado.
Un besazo, y un te quiero pa mis pequeños.
Ah! y por cierto, la boda pa cuando? jejejeje, la madrugada me confunde, y ya ni sé lo que digo, jaajjajaja

Aldahara Amaranta Soraya María Ana Belén Amadhys dijo...

hola, estaba buscando imagenes de lobos y asi yege a tu blog en el cual me pare a leer, me ha parecido muy interesante,un saludo